Dada
la sanción impuesta al Barcelona Fc (prohibición de contratación de jugadores,
sesión y transferencia de jugadores hasta julio 2015), por parte de la FIFA, en
la previa del partido que enfrentó al Barcelona Fc contra el Real Betis Balompié
(3-1) correspondiente a la jornada 32 (05/04/2014), se pudo observar en unas de
las gradas del Nou Camp una pancarta, que la afición blaugrana desplegó con la
siguiente frase: “La Masía no se toca”, ya que consideran que la medida
impuesta además de injusta, afectaría notablemente el modelo de desarrollo
deportivo – humano que se lleva a cabo en dicha institución y que grandes
éxitos han generado al club blaugrana, siendo Messi, el más notable de ellos.
Mas
allá de valorar si dicha sanción se ajusta a derecho, pues para ello previa solicitud
del Barca, el TAS (Tribunal de
Arbitraje Deportivo) es el órgano competente para determinar si la FIFA
tiene o no la razón, me parece conveniente debatir con ustedes mi punto de
vista sobre tal acción, ya que a mi juicio, la FIFA no está en contra de “la
Masía” ni de su modelo de gestión, siempre y cuando ésta no incumpla con la
normativa referida a contratación, sesión y transferencia de jugadores, sobre
todo si estos son menores de edad.
En
todo caso es oportuno recordar que tanto el Nantes Francés; el Roma de Italia;
y el Chelsea de Inglaterra, fueron en su momento igualmente
sancionados por la FIFA por violentar la misma norma que supuestamente
violentó el Barcelona Fc, aunque al Chelsea, tras recurrir al TAS, dicha
sanción le fue levantada.
Es
decir, todos los clubes del mundo saben muy bien lo celosa que es la FIFA con
respecto a la violación de la norma de contratación de jugadores menores de
edad, por lo que parece inconcebible, que hoy día un club de fútbol de la talla
del Barcelona Fc, sea sancionado por tal acción, ya que no debería haber duda
al respecto de la interpretación de dicha norma. Por lo que caer en la diatriba política de que
si la FIFA está en contra del modelo de gestión de la Masía es sencillamente
absurdo y si se quiere hasta paranoico, pues la FIFA, según mi apreciación, lo que combate
a capa y espada es el manejo amoral y poco ético de la contratación de menores
de edad, así como la posibilidad de que éstos sean desterrados de sus países de
origen y alejados de sus seres queridos o sencillamente hasta esclavizados bajo
el pretexto de ser el futuro crack mundial en detrimento de su desarrollo
personal, su presente y su futuro.
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